Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Angustia

Él carga con nosotros

Ante la angustia que trae algunas veces los sucesos de la vida el Salmo que meditamos hoy en la Liturgia nos regala un aliento "¡Bendito sea el Señor día tras día! El carga con nosotros, Dios de nuestra salvación". [Salmo 68 (67) 10-11. 20-21]  En donde se nos muestra también 3 actitudes que mucho ayudarán a caminar con Él en dicho trayecto: Bendecir. Memoria. Meta. Hemos aprendido de Él lo que significa la bendición, lo bendecimos porque sabemos lo que significa ser bendito. Cuando hablamos de bendición entendemos que Dios nos ha ensalzado con algo, nos ha colmado de algún bien que nos hace prosperar sea en la salud o en cualquiera de nuestras necesidades. Es bendito, porque nos bendice. El salmista es consciente, además, de todos los momentos en la historia cuando Dios ha cargado con su pueblo, el rescate de la opresión, lo que sucedió con los enemigos que lo perseguían y todas la bendiciones que recibieron a lo largo del camino. Cargar es echar un peso sobre alguien. Hacer...

Él transforma la tristeza en alegría

Al finalizar el Evangelio de hoy vemos que el Señor, dirigiéndose a sus discípulos, les dice: "pero vuestra tristeza se convertirá en gozo" [San Juan 16, 16-20] . Y esta es una primera idea que contiene un gran mensaje, sólo Él, Dios, tiene el poder de transformar la tristeza en alegría.  Y el Señor les advierte una dualidad en el ser humano, al decirles: "lloraréis y os lamentaréis, y el mundo se alegrará". Por un lado la tristeza de los discípulos y al mismo tiempo la alegría del mundo. ¿Por qué sucederá esa tristeza? Porque Jesús ya no estará con ellos como lo han tenido hasta entonces. El maestro que anduvo con ellos enseñándoles ya no estará, el amigo que compartió muchos momentos, el médico que curó el cuerpo y el alma, no estará más con ellos.  Esto también hoy lo vivimos cuando Jesús no está, comenzamos a sumirnos en una tristeza que no alcanzamos a identificar fácilmente hasta cuando toma alguna forma en nosotros. Mas el Señor promete una alegría posterior....

Cómo hacer con lo que nos angustia

Hoy en la segunda lectura de la Misa recibimos una clave que nos puede ayudar mucho a sobrellevar las dificultades con las que cada uno se encuentra en el camino. San Pablo escribe a los Filipenses y dice: "Que nada os angustie; al contrario en cualquier situación presenten sus deseos a Dios, orando, suplicando y dando gracias". Rápidamente solemos angustiarnos y quizá al quedarnos en esta experiencia renegamos y nos amargamos, más el Señor nos da un mensaje claro "que nada nos angustie". Nada debería ser causa de angustia para el que tiene puesta su confianza en el Señor, para aquél que sabe bien de quien se fía. Es lo que estamos llamados a vivir, la confianza en Él. No nos deja sólo con esta idea, San Pablo en su carta a los Filipenses nos dice cómo podemos lograrlo. Primero debemos presentar todas nuestras inquietudes al Señor , en cualquier circunstancia, duda, sufrimiento, incertidumbre, soledad, etc.  En segundo lugar debemos siempre rezar , pidamos al ...

Lecciones de Ester: Cómo rezar ante el peligro

La primera lectura que nos propone la liturgia de hoy relata la experiencia de la Reina Ester ante el peligro inminente. Para entender el contexto de esta oración es bueno que repasemos un poco la historia de Ester en este enlace , pues aquí nos dedicaremos a profundizar en algunas lecciones para nuestra vida cotidiana a partir del ejemplo de esta mujer piadosa. En primer lugar nos encontramos con una situación particular y es que la reina Ester teme un peligro inminente. Habiendo conocido un poco más de su historia sabemos que se trata de la amenaza en la que se ve su pueblo, se trata de un peligro de muerte para su pueblo por parte de su perseguidor, el ministro Amán. Entonces Ester descubriéndose necesitada de Dios , dice esta oración... "Señor mío, único rey nuestro. Protégeme, que estoy sola y no tengo otro defensor fuera de ti, pues yo misma me he expuesto al peligro. Desde mi infancia oí, en el seno de mi familia, cómo tú, Señor, escogiste a Israel entre las naciones, a ...

El Señor nos libra del mal y nos da la paz

La primera lectura que meditamos hoy ( 2 Samuel 7, 4-17 ) nos muestra que Dios desde que nos ha invitado a una misión no nos ha dejado solos, él siempre ha estado con nosotros. Natán recibe de Dios una visión en la que le da un mensaje para David. En primer lugar dice Dios "Yo te saqué de los apriscos, de andar tras las ovejas, para que fueras jefe de mi pueblo Israel". Sobre esta línea podemos reflexionar acerca de aquello que Dios hace con nosotros, pues en un momento de nuestras vidas Él también nos ha llamado y en ése encuentro, el cual seguramente guardamos en el corazón, nos hemos experimentado salvados y llamados a una nueva misión. Este camino, el de seguir al Señor, seguir el llamado o la invitación que él nos ha hecho, no es sencillo, tiene momentos de dificultad, momentos de crisis, de duda, inseguridad, y en medio de este camino esta lectura nos da muchas luces, porque en medio de estas experiencias el Señor nos acompaña, nos libra del mal que nos acecha y nos...

Qué bueno es el Señor

Muchos motivos hay para agradecer la bondad del Señor. Aquí uno más. Sucede que cuando lo buscamos, sea con un grito o un susurro él nos escucha. Estos gritos o susurros que manifiestas nuestras inquietudes o desesperaciones frente a diversas generan en nosotros angustias, el salmo 33 nos sigue dando luces, pues frente a lo anterior nos dice que el Señor nos libera de esas angustias. Por último agradezcamos a Dios pues él está cerca de nosotros cuando pasamos por tribulaciones, él nos salva cuando estamos abatidos, cuando suframos males allí está él para ayudarnos.

Invoquemos al Señor

No pocas veces en nuestra vida atravesamos por momentos de aflicción, momentos difíciles en los que tenemos que dar testimonio de lo que creemos, pero cuesta, no es algo sencillo, el ánimo nos juega en contra, nos desalentamos, se presentan en el camino otras ofertas y muchas veces no sabemos cómo asumir y llevar este momento. El Señor nos da hoy una clave en el salmo que propone la liturgia de hoy. "Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha", dice la antífona. Y efectivamente se presenta como algo que debemos hacer: Invocar al Señor, el mismo salmo nos propone "consultar" cuando dice en una de sus estrofas "yo consulté al Señor y me respondió, me libró de todas mis ansias". Debemos considerar a Jesús en nuestras dificultades, consultarle, hablarle, para esto nos ayudará ir a visitarlo a una capilla y arrodillarnos o sentarnos a conversar con él, contarle lo que nos sucede, nuestros problemas, como bien dice este salmo, él nos responderá, y nos ...

En la tristeza y en la angustia el Señor nos salva

Cada día que pasa descubrimos que un día tiene sus propios afanes, descubrimos que hay problemas, dificultades, obstáculos, descubrimos también tentaciones, ataques cuando uno ha hecho la opción de un estilo de vida cristiano y mientras uno más se compromete más difícil a veces se pone la vida, en fin, esta segunda y tercera estrofa del salmo que nos presenta la liturgia de la Palabra de hoy (149, 1-9) nos ayuda a ver que el Señor verdaderamente interviene y está presente en estos momentos cuando nosotros de corazón y con fe, en la oración personal, lo invocamos. Me envolvían redes de muerte,    me alcanzaron los lazos del abismo,    caí en tristeza y en angustia.    Invoqué el nombre del Señor:    “Señor, salva mi vida”.  El Señor es benigno y justo,    nuestro Dios es compasivo;    el Señor guarda a los sencillos:    estando yo sin fuerzas, me salvó. Mucha gente hoy cae en tristeza y angustia ante l...