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Pedid, buscad y llamad

En el Evangelio de San Lucas (11, 5-13) hoy nos da el Señor algunas luces respecto a esa relación de hijo - Padre. Somos sus hijos, y si lo somos, es decir vivimos auténticamente como tales, él velará por nosotros, por lo que necesitemos, lo que nos haga falta.

Nos invita pues, a recurrir a él con confianza de hijos. Como dice en la pregunta que plantea: "Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿Cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?".

Entonces el Señor nos dice: "Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá".

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