En medio de la dificultad, alaban al Señor. Se trata de la historia de Sidrac, Misac y Abdénago, quienes ante la propuesta del rey Nabucodonosor, de adorar a su dios de oro se resistieron y negaron a hacerlo, entonces el rey dispuso, luego de presionarlos más, quemarlos en el fuego, el cual debido a la furia de Nabucodonosor, se preparó siete veces más fuerte que de costumbre, eran lenguas de fuego gigantes. Los tres estaban atados, y fueron atados por los hombres más robustos, a pedido del rey. Entonces los escucha cantar himnos, y extrañado y asombrado preguntó por si eran ellos los atados y puestos en fuego siete veces más fuerte, y luego preguntó sobre lo que veía, se trataba de cuatro hombres paseando por el fuego sin sufrir nada, y el cuarto parecía ser divino. Entonces Nabuconosor bendice al Dios de los tres porque ha escuchado a aquellos que confiaron en él y ha enviado un siervo a salvarlos. ¿Cuántas veces ante las fuertes e intensas dificultades que tenemos nosotros so...